primeros destellos de la escuela llamada del Renacimiento, cabalmente a la sazón que Hernán Cortés guerreaba en México por conquistar este imperio. Creció luego aquella luz en manos de su discípulo , pintor, escultor y arquitecto, que fue como Berruguete a estudiar en Italia. Tras él porción de españoles volaron a la culta península, y de regreso a la patria esparcieron entre nosotros la doctrina que allí habían cogido. Así lo hicieron el mudo , , el célebre , , Pedro de Villegas, mi paisano el catalán Mingot y otros. Además, algunos artistas extranjeros de alto mérito, como el , vinieron a trabajar en España, atraídos de la regia munificencia de Carlos V y . De esa manera se formó dentro del siglo XVI la esclarecida escuela española que en el siguiente tuvo hombres como , y , y de la cual procede y es una rama esta de México.17
Lo que es el arte de copiar, o sea, reproducir fielmente en la obra que se hace la obra que se toma por dechado, parece cierto que había adelantado bastante en manos de los alumnos mexicanos de aquella época. Torquemada asegura que si bien en tiempo de la gentilidad no sabían hacer hombres hermosos, después que fueron cristianos y vieron los cuadros que se traían de Europa no había retablo ni imagen por prima que fuese que no la retrataran y contrahicieran.18 Lo mismo había escrito el padre .19 Y nuestro buen Bernal Díaz del Castillo no sólo dice que los lapidarios y pintores que
